La inversión es un tema muy complicado, en parte por su constante cambio y su volatilidad. Esto añade a la inversión mucha importancia, sobre todo si ponemos en juego nuestros ahorros. Es muy importante revisar nuestra cartera de forma periódica, sobre todo si aún no hemos conseguido nuestros objetivos.
Algunas inversiones cambian mucho de un día a otro, o a lo largo de un mes, por eso hay que tenerlas controladas. Es decir, en términos económicos, se aprecian y se deprecian.
Los precios de algunos instrumentos se mueven en dirección contraria, por ejemplo los bonos y las acciones. Al dividir nuestra cartera en estos dos instrumentos, debemos tener en cuenta cuando van a tener su mejor momento y cuando no, para variar el peso de cada uno de ellos. Es decir una alineación de nuestra cartera en función de nuestros objetivos.
Pero para llegar a este equilibrio es necesario tener una estrategia. Para poder escoger la más adecuada, debemos pensar en nuestra situación, si tenemos cerca la jubilación, si estamos ahorrando para ella, o si queremos dividendos. De la mano de wisebread, vamos a dividir en tres estrategias.
Estrategia Tiempo
Para un enfoque sistemático, los inversores pueden seguir la estrategia en función del calendario. Esto puede ser diario, mensual, trimestral, anual o lo que elija. Con este enfoque no hay que preocuparse del desvío de nuestras inversiones. La única variable que afecta a la decisión es el tiempo. Por supuesto, la frecuencia se debe seleccionar en base al límite de tiempo, tolerancia al riesgo, la estrategia de diversificación o los costes de reequilibrio.
Estrategia Umbral
Con la estrategia de umbral, la única cosa que llevará a un reequilibrio es la desviación de metas propuestas, como un 3%, 5% o 10%. La decisión sobre esta estrategia podría suponer una revisión diaria, mensual o trimestral. O quizás cada 10 o 15 años. Una vez más, los objetivos de inversión ayudarán a determinar si esta estrategia es adecuada.
Estrategia Mixta
Como bien dice el nombre, una estrategia mixta es la que combina el tiempo y el umbral o meta propuesta. Es decir se reequilibra la cartera en función de las dos. Si decimos modificar la cartera según el calendario, y llegado ese momento, no hemos llegado a la meta, esperamos a la siguiente revisión en función del tiempo.
El cambio de la cartera de inversión, resulta más costoso para un inversor bajo-medio, por la continua compra venta de activos. Pero la mayoría de los expertos recomiendan por lo menos, modificarlo una vez al año, y revisar los objetivos conseguidos y ajustarlo a esos objetivos si no se han conseguido, o a otros nuevos.
fuente: wisebread
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